Tras un giro en la política económica, las reservas netas terminaron en su nivel más alto del año
El dólar soja 2 y otras medidas implementadas en los últimos meses permitieron cerrar 2022 con USD 44.588 millones de reservas brutas y casi USD 8.700 millones de reservas netas.
La Argentina llegó a la última jornada financiera de 2023 con el nivel de reservas internacionales del Banco Central más alto del año, tanto en el cómputo de las reservas brutas o totales como en el caso de las reservas netas.
Sobre el final del día, fuentes oficiales destacaron que un año atrás, las reservas brutas eran inferiores a los USD 40.000 millones y las netas de USD 2.277 millones. Hoy, esas cifras se incrementaron a USD 44.588 millones y a USD 8.696 millones. Este último dato resulta significativo ya que representa un monto de casi 3 veces respecto al cierre de 2021 y es el que analiza el FMI para el cumplimiento de las metas incluidas en el acuerdo con la Argentina.
Con el ingreso generado a partir del dólar soja 2, las reservas se incrementaron en diciembre más de USD 2.000 millones, adicionales a lo ingresado por los desembolsos del Fondo. Las dos etapas del plan para incentivar la liquidación del complejo sojero dejaron una liquidación superior a los USD 10.000 millones (USD 7.600 millones en la primera etapa, USD 3.000 millones en la segunda) que fortalecieron las arcas del BCRA.
“Massa llegó el 3 de agosto con el número de reservas más bajo del año y terminó hoy con el récord del año. En las reservas netas, 2022 finalizó con uno de los niveles más altos de los últimos años”, explicaron un funcionario del Palacio de Hacienda. La fuente repasó que, además de llevar adelante el día a día del acuerdo con el Fondo Monetario, durante la gestión de Massa se cerraron varios frentes con el exterior que estaban pendientes. Entre ellos, destacó el cierre de la negociación con el Club de París y las tratativas con organismos internacionales como el BID, el Banco Mundial y el Banco Central de China, con quien la Argentina lleva adelante un swap de monedas que refuerza la posición de reservas brutas.
Ayer se sumó otro ingreso relevante, mayor a los USD 400 millones, proveniente del plan de inversiones para la construcción de represas en Santa Cruz. Hoy, en el cierre del dólar soja 2, el BCRA informó una suba de las reservas de 422 millones de dólares.
“La evolución económico-financiera del país ha sido muy buena en 2022, superando las expectativas relevadas en el mercado a inicios de año. No sólo se ha mejorado desde el punto de vista de las inversiones locales, sino que las principales variables macroeconómicas se esperan superen las señaladas en el REM de enero de este año”, señalaron en el ministerio de Economía
En el Relevamiento de Expectativas de Mercado que cada mes hace el Banco Central entre los principales analistas del mercado, a principios de 2022 las consultoras privadas estimaban un crecimiento del PBI del 3% , por debajo del 4% previsto en la ley de Presupuesto, a la vez que estimaban un déficit fiscal primario del 3%. En el Gobierno estiman que este año el PBI crecerá por encima del 5,5% y que se cumplirá con la meta de déficit fiscal primario del 2.5% acordada con el Fondo, más cercano al 1,9% establecido en el Presupuesto.
“Hoy en día, económica y financieramente estamos mejor que el año pasado. Hay más inflación, sí, pero por lo menos no se escapan las reservas y se ha reducido el déficit fiscal. Es un proceso, y la gente va a empezar a invertir cuando crea que el proceso político es un proceso de estabilidad, donde no continuamos con la guerra civil que hay en este momento entre la política y la economía”, señaló Javier Timerman, socio de AdCap Grupo Financiero en declaraciones radiales.
Un informe de la consultora Ecolatina señaló que el año 2022 exigía “un giro en la política económica que, en pos de evitar una crisis, hacía prever que la inflación no se desaceleraría y que la actividad gradualmente iría moderando su tasa de expansión”. Ese escenario apareció tras un primer semestre en el que el Gobierno tuvo dificultades para acumular reservas y sembró “dudas respecto de la sostenibilidad” de la deuda en pesos.
“En medio de estas turbulencias económicas es que asume Sergio Massa al frente del Ministerio de Economía a principios de agosto, decidido a profundizar el rumbo previo de la política económica frente al imperante objetivo de apaciguar la inminente crisis y evitar una devaluación desordenada. En el marco de este giro pragmático, se fueron anunciando políticas a lo largo del periodo agosto-diciembre en base a tres principales aristas: fortalecer el mercado de deuda en pesos y reducir el exceso de demanda en el mercado cambiario, y, por otro lado, frenar el shock inflacionario”, resumió Ecolatina.