“Para que sepa que no se deben jugar con las mafias”, dijo uno de los criminales encapuchados al hablar ante la cámara. Luego obligaron a uno de los presentadores a dirigirse en vivo y pedir que se retire la Policía. De inmediato iniciaron los disparos en medio de gritos de los trabajadores.
Este hecho, junto a otros actos de violencia, se registra en el contexto en el que el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, decretara un estado de excepción y toque de queda el lunes en todo el territorio de la nación andina.
Tras el episodio en la TV estatal de Guayaquil, Noboa, firmó un decreto que declara al país en estado de «conflicto armado interno» y ordena a las Fuerzas Armadas «ejecutar operaciones militares para neutralizar» el accionar de una veintena de bandas criminales.